Los cambios son necesarios, nos hacen crecer, adaptar y aprender. Durante dos años escribiendo con mucho amor el #hautBlog, ha llegado la hora de revelar mis secretos y la manera en que me enamoré de la dermatología para así, escribir sobre ello.
La historia con mi piel siempre se ha visto envuelta en mi profesión, durante muchos años crecí viendo las revistas y la televisión y lo único que veía eran pieles perfectas, así que, al dedicarme a la actuación y el teatro, lo único que quería era tener la piel igual sin un presupuesto en especial. Nunca sufrí de problemas más allá de dermatitis atópica pero, debido a mi trabajo, debía rasurarme cada día para mantener el mismo personaje (y porque no soy fan del vello facial), esto provocó una naciente foliculitis cuya única solución permanente fue la depilación permanente mediante láser.
En el proceso entre la interminable experiencia láser, la foliculitis y el dolor que provocaba, decidí que crear a Select Ishtar es lo que quería hacer por el resto de mi vida; un escritor que se transformaba todos los días en una expresión artística denominada drag. Los riesgos de maquillarse frecuentemente y aprender, como único canvas tu piel, se comenzaban a experimentar: buscar un primer perfecto, adaptarte a bases pesadas de televisión y teatro y maquillar cada centímetro de tu rostro (así como desmaquillarlo).
Sin embargo, las respuestas a todas estas interrogantes se dieron al llegar a trabajar a Haut Boutique. Inicié con la esperanza de conocer más sobre dermatología para así impulsar mi imagen en cualquiera de las dos carreras a las que me dedicaría. Al llegar lo primero que me preguntaron fue: ¿cuál es tu rutina dermatológica? Fue bastante incómodo decir que me lavaba la cara con jabón neutro y a veces, solo a veces, me ponía mascarillas del súper que sentía necesitar.
El resto es historia, con la guía de Itzia Rodriguez, Laura Rodríguez y la doctora Ingrid López, así como la persona que me salvó la piel: Dra. Gladys Paguaga, me enamoré de la dermatología, me fascinaba intentar combinaciones de productos que beneficiaran mi piel y así recomendarlos a chicxs como yo que no sabían por dónde iniciar. El placer que tenía de que regresara un cliente y me felicitara por mis recomendaciones, además halagando mi piel, era indescriptible. Así que, cuando Laura Rodríguez, descubrió que soy escritor como hobbie y me pidió comenzar con el #hautBlog no lo pensé dos veces.
Gracias a este blog he capacitado, recomendado y ayudado a muchas personas a amar su piel para amar a la de los demás. Es todo lo que quería lograr, ya que, como el arte del drag, entre más se practica, más se domina. Con mi fuerte siendo el maquillaje, quería que mi lienzo fuera perfecto para cada día necesitar menos productos y viéndome en el espejo, transformándome en diferentes personas y poniéndome en su lugar, fue la manera de empezar a recomendar. Creo que lo que más me hacía reflexionar era mi afán de encontrar pequeñas diferencias entre productos “iguales” y, aceptar que algo no lo sabía e investigarlo inmediatamente para dominarlo.
Así que, si algún día, una doctora me pedía saber algo de un producto y no lo sabía, escribía un blog sobre ello para después capacitar a todas las chicas que trabajan en Haut Boutique. Así que cuando leo cada una de mis entradas las veo como un blog de notas que me preparó en este largo camino.
Mi secreto no es tan secreto como muchos pensarían: amar tu piel es observarla todos los días y saber que con ella puedes transformarte en miles de pinturas, en miles de emociones y que, gracias a ella puedes moverte, nadar, abrazar y ponerte un cubrebocas. Tu piel es tu hogar, es un ecosistema perfecto que describe quién eres y por lo que has pasado. No existe piel perfecta, existe TU piel y amarla es mantenerla sana.
Gracias a todas las personas que impulsaron estas entradas y mi trabajo fuera de ellas. Ser un artista de la piel es algo difícil, a pesar de no dominarlo, espero que las entradas que hice les ayuden en el futuro a identificar los productos que necesitan y, si necesitan ayuda, no piensen dos veces en escribirme en mis redes sociales. @selectishtar
Punto final.
