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¿Cómo exfoliar la cara correctamente? Guía paso a paso para una piel radiante

¿Cómo exfoliar la cara correctamente? Guía paso a paso para una piel radiante

Dentro del Skincare, existen demasiados medios y procesos para arreglar el estado de nuestra piel. Y entre tantas opciones, existe una muy elemental que me ayudó a modificar el estado de mi cutis y mejorarlo hacia una apariencia más acorde a mis deseos: la exfoliación.

Por esto, hablaré en este artículo sobre la importancia de estimular este proceso natural de la piel y usarlo a tu favor para mejorar sus condiciones, justo como hice yo. 

¿Por qué es importante exfoliar la piel del rostro?

Como ya mencioné antes, la exfoliación es un proceso natural del sistema cutáneo que tiene muchos efectos positivos sobre su funcionamiento.

Entre estos, podemos mencionar los siguientes:

  • Elimina las células muertas

Las células de la piel tienen un ciclo de vida, por lo que al final de este mueren y son reemplazadas por nuevas. La exfoliación tiene justamente como objetivo principal removerlas y evitar su acumulación sobre el cutis, ya que esto puede derivar en problemas como acné, una apariencia menos sana y robar esa estética fresca y radiante.

  • Evita la obstrucción de los poros

Los poros justamente son pequeñas aberturas en la piel que tienen como función regular la temperatura a través del sudor y eliminar impurezas, como el sebo y las células muertas. Una correcta exfoliación de parte del sistema cutáneo, evitará que estos canales se obstruyan y den paso a infecciones que deriven en acné. 

  • Mejora la textura de la piel

Si el proceso de exfoliación se da de forma óptima, entonces por lógica la constitución dérmica estará formada mayormente por células nuevas. Esto es lo que da paso a una piel tersa y suave. 

  • Mejora la renovación celular

Gracias a que la exfoliación filtra las células muertas, esto promueve la producción de nuevas células que sustituyan las anteriores. En caso de que este proceso se ralentice o merme su capacidad por algún motivo específico, habrá una combinación entre células muertas y otras que ya no funcionan correctamente, pero continúan dentro de la constitución dérmica. 

  • Prepara la piel para el Skincare

Para que las cremas y serums se puedan absorber con efectividad, es necesario que los poros no estén obstruidos o con presencia de desechos como son las células muertas. Con una correcta exfoliación, tienes asegurada una mayor eficacia en cualquier producto que apliques sobre la superficie cutánea. 

¿Por qué es necesario utilizar exfoliantes?

A pesar de que la piel exfolia de forma natural las células muertas, este proceso se puede ver afectado por múltiples factores como: la edad, la exposición solar, poca capacidad de hidratación, así como el uso de productos muy abrasivos.

Es por esto que dependiendo del estado de nuestra piel, es necesario integrar productos exfoliantes físicos o químicos dentro de nuestra rutina.

Ahora que he mencionado estos tipos de exfoliantes, muy probablemente te he despertado las dudas sobre sus diferencias. No te preocupes, aquí te lo explico.

Tipos de exfoliantes (químicos vs. físicos) y cuál es mejor para ti

Dentro de los productos dermatológicos que se han desarrollado con esta finalidad, existen dos tipos: químicos y físicos.

  • Exfoliantes químicos

Los exfoliantes químicos no requieren de movimiento o cualquier estímulo similar, sino que gracias a su constitución de ácidos o enzimas, disuelven las células muertas.

  • Exfoliantes físicos

En cambio, los exfoliantes físicos son aquellos que pretenden eliminar las impurezas como células muertas por medio de la fuerza mecánica. Es decir, gracias a su textura, que está conformada por sustancias granulares y el movimiento manual, se remueve de la superficie cutánea cualquier desecho.

¿Cuál es mejor para ti?

Ninguna de estas dos opciones son mejores en sí, sino que dependen de las necesidades del usuario, así como su capacidad para fidelizar su relación con estos. 

Dicho esto, cada uno tiene sus características y a través de ellas podrás determinar si se adaptan a ti:

  • Exfoliantes químicos

A pesar de que los exfoliantes químicos tardan más en hacer efecto, tienden a ser más delicados con el cutis, por lo que están diseñados más que nada para usuarios con piel delicada. Sin embargo, es necesario recordar que al tratarse de ácidos o enzimas, son abrasivos y requieren que se respete el tiempo de aplicación de forma prolija.

Además, estos pueden servir no solo para eliminar las células muertas, sino que también son eficaces para problemáticas cutáneas como manchas, acné e incluso en algunos casos específicos, el envejecimiento de la piel.

También preparan la piel para la aplicación de otros productos. Sin embargo, justamente con el uso de estos exfoliantes, se aumenta la necesidad de la fotoprotección.

  • Exfoliantes físicos

En el caso de los exfoliantes físicos, los resultados son inmediatos debido a que la acción mecánica es más tajante. Sin embargo, al tratarse de un proceso que se mide con nuestra propia fuerza, también aumentan la posibilidad de lesionar la superficie cutánea. Por eso, no es ideal para pieles delicadas.

Dicho esto, dependerá de tu capacidad de aplicación que los resultados sean uniformes, no irriten y causen desgarros en la piel.

Se trata de una opción con mayor nivel de control sobre los resultados, pero que se limita a remover las células muertas y no trata ninguna otra problemática cutánea como el acné, manchas, o envejecimiento.

Pasos para exfoliar tu cara sin dañarla (frecuencia y técnicas recomendadas)

  1. El primer paso, sería preparar el cutis limpiándolo previamente con delicadeza y usando agua tibia. Es importante que al secar el rostro, se haga con mucha delicadeza.

  2. Aplica el exfoliante. En caso de ser químico, es necesario seguir las instrucciones de uso de forma prolija. Si se trata de un exfoliante físico, es importante aplicarlo con mucha delicadeza y escuchar tu piel.

  3. Remueve el producto en su totalidad. Es importante asegurarte de no dejar el producto más tiempo del recomendado. Puedes utilizar agua tibia para este proceso.

  4. Luego de remover el exfoliante, es necesario aplicar una crema hidratante que sea muy amigable con el cutis. 

 

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