La composición de los tónicos varía de acuerdo al producto. En general están provistos de agua para proporcionar una hidratación extra. Adicionalmente, pueden contener vitaminas, ácidos, sustancias antiinflamatorias y otros componentes.
La mayoría de los tónicos son aptos para cualquier persona. Sin embargo, te recomendamos elegir uno acorde a los requerimientos de tu piel para aprovecharlo al máximo.
Esto se debe a que, dependiendo de su formulación, podrás obtener diferentes beneficios.
Por ejemplo, los tónicos con ácido hialurónico hacen mayor énfasis en la hidratación, siendo ideales para piel seca. Mientras que aquellos que contienen ácido glicólico ayudan a regular la grasa, previniendo el acné y la dilatación de poros.
Por otro lado, al tratarse de un producto que penetra rápidamente en la piel, no es necesario que lo aclares con agua luego de aplicarlo. Solo asegúrate de que se seque bien antes de usar el suero o la crema.