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Cuerpo

Cuerpo

Nuestra piel es el órgano más grande de nuestro cuerpo, el cual constituye aproximadamente un 20% de nuestra masa. Ella ayuda a regular nuestra temperatura, nos cubre del sol, retiene el agua, entre otras maravillas más. 


La piel de nuestro cuerpo es un traje perfecto hecho a la medida el cual requiere de cuidados para lucir terso y saludable. Una piel radiante de los pies a la cabeza nos ayuda a tener seguridad y empoderarnos en nuestro día a día.

El secreto de una piel reluciente está en el cuidado dedicado

A lo largo de nuestra vida, la piel se va deteriorando por diversos factores. También somos propensos a desarrollar enfermedades cutáneas, como resequedad, psoriasis y urticaria.

Esto puede afectar especialmente a aquellas personas con una piel sensible o quienes pasan demasiado tiempo bajo el sol.

Por esta y otras razones, el cuidado de la piel del cuerpo se vuelve imprescindible. Es nuestra única “arma” para prevenir enfermedades y darle esa apariencia firme y lisa que todos deseamos.

La piel exterioriza cómo estamos por dentro. Y su cuidado nos ayuda a protegernos de diversas afecciones que pueden volverse más graves que una simple mancha, 

Además, si usas cremas y otros productos corporales desde temprano, serás capaz de retrasar los signos de la edad. 

El cuidado de la piel del cuerpo comienza con una buena limpieza. No es necesario que te talles con rudeza todos los días, pero sí deberías mantenerla lo suficientemente limpia.

Por supuesto, esto debe ir acompañado de hidratación diaria con cremas o serums que aporten suficiente agua a la piel. También puedes potenciar los efectos asegurándote de tomar suficientes líquidos.

La cereza en el pastel es el famoso protector solar. No hay forma más efectiva de mantener tu piel segura que integrando un buen bloqueador en tu rutina diaria.