Sudor excesivo en días de calor: cómo mantenerte fresco y seco

Ya hemos hablado anteriormente en otros artículos de cómo preparar la piel para protegerse de los rayos UVA y UVB en primavera. Sin embargo, no todo son los efectos del sol en la piel y aunque sí tocaremos ciertos puntos propios de la reacción cutánea ante esta estación climática, este artículo se centrará en un tema apremiante: la sudoración excesiva.

En mi experiencia, los días en donde más rayos de luz solar hay, también se traduce en estar empapada de sudor. Y, sin la preparación necesaria, puede hacer que tu desempeño en el día a día se vea comprometido por esta reacción fisiológica tan molesta. Maquillaje, ropa, incluso la misma piel se convierte en un castigo.

Dicho esto, acompáñame a averiguar cómo mantenerse fresco y seco en días de calor:

Cuidado de belleza ligero

Para comenzar, es necesario hacer énfasis en cómo reacciona nuestra piel ante un clima cálido. Con los rayos del sol y el calor al máximo, la tendencia de tu cutis es de producir más sebo, lo cual se traduce fácilmente en poros obstruidos y la aparición de problemáticas cutáneas como el acné y espinillas.

Pero también, implica que mucho sol penetrará tu piel y por eso, será normal que el sudor se vuelva parte de tu outfit y que transmita tu estado actual a los demás.

Dicho esto, existe una solución para poder evitar el sudor excesivo y también reclamar esa comodidad a la cual tenemos derecho en nuestro día a día y es simplemente cambiar a productos más ligeros.

En primavera y cuando hay mucho calor, es necesario optar por un limpiador, crema y tónicos de fácil absorción y de una textura cómoda.

Si no llevas este consejo a cabo, te pasará como a mi en varias ocasiones que he sentido como una película gruesa de producto sigue estando en mi piel desde que comienza la rutina, hasta finalizarla. 

Agua micelar 

He comentado sobre el uso de agua micelar en otros artículos relacionados a la temperatura. Sin embargo, es la primera vez que tengo la oportunidad de mencionarlo justamente en este tema específico. Si algo me ayudó mucho a sentirme cómoda en estaciones calurosas, fue llevar una botella de agua micelar a la mano.

Cumple dos funciones elementales y es la de aportar una ayuda extra al sistema cutáneo para poder hidratar la superficie y aprovechar la humedad circundante. 

Pero sobre todo, en este artículo, brilla por su capacidad de aportar frescura y evitar aquellos golpes de calor que rozan en el sofoco y pueden mermar nuestra capacidad de logística en el día a día.

Con solo unos cuantos sprays, te sentirás como nueva y lista para afrontar lo que queda de día.

En el caso de llevar maquillaje, también puedes aplicar un poco de agua termal y causar el mismo efecto de frescura, pero sin comprometer la base.

Antitranspirante

Claro está, estos consejos difícilmente pueden evitar el uso de antitranspirantes, ya que si bien son sumamente efectivos para aumentar el nivel de frescura y evitar el sudor excesivo, en climas muy cálidos siempre se requerirá de un apoyo extra.

Por eso, me gustaría compartir la experiencia que tuve con el uso de uno específico. Si bien me había armado con todos mis conocimientos para enfrentar la primavera, la sudoración seguía siendo parte de mi día a día. 

Sin embargo, fue el uso de cloruro de aluminio dentro de mis productos del cuidado lo que evitó que el sudor fuese parte de mis vestimenta. 

Apenas adquirí Skindry de Farmapiel, logré frenar por completo la sudoración en áreas específicas que me hacían sentir insegura e incómoda. 

La mejor parte de su uso, es que el nivel de protección ante la transpiración es de hasta 72 horas, lo que me permitió recobrar mi confianza en mi imagen y mi capacidad de mantenerme pulcra en todo momento. 

Bañarse al llegar a casa

Sé que para muchas personas una ducha puede ser la mejor forma de comenzar el día. Sin embargo, dado el clima que hay en primavera, es mucha la contaminación ambiental que recibe nuestra piel al desempeñar el día a día.

Por eso, es muy probable que al llegar a casa estés llena de sudor, suciedad, contaminación, etc.

Para mi, la mejor hora de tomar una ducha refrescante es al volver de la jornada diaria. Esto me permite asegurarme de que una vez haya finalizado el momento de mayor exposición ambiental, pueda remover toda impureza y residuo.

Obviamente, nuestro cutis estará protegido tanto en la mañana como en la noche, gracias a nuestra rutina diurna y nocturna. 

Este consejo está orientado más que nada para obtener frescura, alivio y también asegurarnos de dejar por fuera toda contaminación que acumulemos en la calle.